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miércoles, 20 de junio de 2018

Taller Hoshin, o cómo mejorar trabajos manuales

En este post me gustaría hablar de uno de los talleres Lean que da más con menos: el taller Hoshin.

Este taller, como todos en el Lean, tiene como objetivo primordial eliminar el desperdicio. En este caso nos centramos en un trabajo manual o semimanual.

Como en tantas ocasiones lo primero que nos hemos de plantear es: ¿este trabajo está optimizado?¿tiene potencial de mejora?¿es muy habitual y repetitivo?

¿Cómo puedo ver si ese proceso tiene potencial de mejora? Observándolo.
Como ya hablamos al comienzo de este blog en el post Cazadores de desperdicio, hemos de ir a observar ese proceso buscando los 7 desperdicios: sobreproducción, esperas, retrabajos, movimientos, transporte, inventarios, sobreprocesos.

A continuación tenemos un video en el que os pediría que sólo veáis hasta el segundo 55 y lo paréis.



https://youtu.be/QA1ddcXfqM0

¿Podrías ver qué desperdicios tenemos? 

Una vez que detectamos que ese trabajo es repetitivo y le vemos potencial de mejora hemos de planificar el taller Hoshin.

Así como otros talleres se realizan parte en sala y parte sobre el terreno, el taller Hoshin se puede realizar directamente sobre el terreno. En este taller haremos uso continuamente del punto 9 del espíritu Kaizen: Probar y validar.

Lo primero que tenemos que tener claro es ¡el equipo! Como hemos hablado en muchas ocasiones, la clave de la mejora son las personas y por esto hemos de definir bien quién interviene en el taller. El principal participant e ha de ser el operario u operarios que realizan la operación. Además, deberemos de valorar si es conveniente que gente de mantenimiento, calidad o ingenieria estén presentes. Posiblemente todos los mencionados acaben estando presentes, ya que mantenimiento igual tiene que hacer alguna modificación en la máquina, la mesa de trabajo, etc... Calidad debera velar por que el nivel de calidad no cambie y deberá modificar las pautas de control si fuera necesario e ingenieria deberá validar el nuevo proceso y actualizar las documentaciones pertinentes.

Ya tenemos el equipo , ahora debemos hacer ver a todos cuál es el objetivo...  
Hacer el trabajo más cómodo al trabajador 
eliminando los desperdicios. 
Y la consecuencia de obtener el objetivo es una mejora de la productividad. Es muy importante tener en cuenta que no buscamos la mejora de productividad "corriendo" más, sino eliminando desperdicios.

Y ahora llega el momento de lanzarnos al taller. El desarrollo del taller dependerá mucho de cada caso, pero lo que siempre he seguido en mi experiencia es: 1 observar - 2 medir - 3 cuestionar todo - 4 proponer cambios - 5 probar - 6 validar cambio - 7 medir y repetir del 4 al 7.

Volvamos a ver ahora el video, en este caso completo:

https://youtu.be/QA1ddcXfqM0

¿Qué os parece? de 46 segundos a 12 segundos.

Una vez visto el final parece sencillo y seguro que muchos pensaréis: "mi proceso es mucho más complicado". Ante esta afirmación yo sólo tengo una pregunta que hacer ¿Y qué dificultad tiene eso? Recueda lo que hemos dicho antes:
Observar - Medir - Cuestionarnos todo - Proponer cambios - Probar - Validar cambio - Medir
En el próximo post os pondré un caso real que he vivido en estos últimos años, pero antes de eso sería interesante que cada uno intente pensar en un proceso o un puesto de trabajo y trate de hacer un hoshin, aunque sólo sea mental. Así podréis comprobar que incluso los procesos complicados son susceptibles de ser mejorados. ¿Te atreves?